Selección de Toros Padres
SELECCIÓN DE LOS TOROS PADRES
A la hora de elegir toros padres para multiplicar en nuestro rodeo, sobre todo cuando se incorporan de afuera, analizamos exhaustivamente tres factores que se retroalimentan entre sí y que consideramos fundamentales:
FENOTIPO
La evaluación fenotípica la hacemos mediante la observación visual y nos focalizamos principalmente en las siguientes características:
Masculinidad: Un toro al que se lo ve masculino nos demuestra que tiene un buen balance hormonal, lo cual está estrechamente ligado a su propia fertilidad y a la fertilidad potencial de sus hijas.
Calidad racial: Cuando hablamos de calidad racial nos referimos a que el reproductor cumpla con las características que indica el patrón de la raza Angus.
Corrección estructural: Este aspecto se relaciona estrechamente con la longevidad de los reproductores, por eso es que le damos mucha importancia, con una mirada absolutamente funcional y no estética. Pensando en la vida útil, no solo de los toros, sino también de los vientres de reposición de nuestros clientes.
Escroto y Testículos: Observamos que la bolsa escrotal sea piriforme con un cuello marcado y que no se vean pelos en ella, para lograr una buena termorregulación testicular y que los epidídimos sean notables. Es nuestra intención que el tamaño testicular sea el correcto de acuerdo a la edad, buscando medidas de circunferencia escrotal que superen, lo más holgadamente posible, los mínimos exigidos, como sinónimo de precocidad sexual y fertilidad.
Tamaño: Cuando hablamos de tamaño no nos gusta hablar de que sean grandes o chicos, o simplemente moderados. Porque son expresiones totalmente subjetivas. Nosotros preferimos hablar del tamaño que se adapta a nuestro ambiente. Y eso es lo que buscamos.
Profundidad: Desde nuestro punto de vista la profundidad es fundamental, ya que está íntimamente relacionada con la capacidad ruminal y cardiorrespiratoria de un animal. El buen desarrollo de los pulmones y corazón, es importante en ambos sexos, pero especialmente en el macho durante el servicio que debe trabajar constantemente. Mientras que un rumen de gran amplitud garantiza contar con una gran cuba de fermentación, si consideramos que la cría habitualmente se desempeña en potreros con pastos de baja digestibilidad. Seleccionar por esta característica nos lleva indefectiblemente a lograr vacas mucho más adaptadas y mantenidas.
Musculatura: No debemos olvidarnos de que estamos criando una raza carnicera, con lo cual es muy importante la musculatura, la cual se relaciona directamente con el rendimiento de res de los animales faenados. Aunque creemos, que el desarrollo muscular no debe ser excesivo en nuestros animales, ya que hay cierta tendencia antagónica con el engrasamiento y tampoco es propio de las razas británicas.
Pelo: Buscamos animales de pelo corto y peleche temprano, ya que estas características están íntimamente relacionadas con la adaptación al ambiente y a la tolerancia a calores extremos, situación cada vez más frecuente en la zona de influencia de la raza Angus.
Docilidad: Le damos mucha importancia, ya que tiene muchas implicaciones positivas y a diferencia de otros rasgos, no tiene ningún antagonismo. Tener animales dóciles implica: menor riesgo de lesiones del personal y de los propios animales, optimización del tiempo durante las labores diarias, disminución de daño en las instalaciones, mejores conversiones durante el engorde, menores lesiones pre faena, mejor predisposición del personal, etc.
Belleza: Consideramos que la belleza de nuestros animales es un aspecto que hay que tener en cuenta a la hora de la selección genética, ya que como a la mayoría de los ganaderos, nos gusta ver animales que “nos llenen el ojo”. También, estamos convencidos de que la belleza contribuye a su valoración económica, debido a que los animales, aunque sean generales, siempre se pagan más cuando tienen esa condición.
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